11 de mayo de 2006

Las reglas del juego



En los años 50, dos matemáticos de la RAND decidieron que iban a saltarse un intermediario. Para simplificarlo, diremos que uno quería vender un coche y otro comprar el mismo modelo de segunda mano. Con un intermediario, el coche costaría 110 $, el vendedor se llevaría 90 y el intermediario 20. El vendedor del coche propuso al comprador 100 dólares, que resultaba redondo y beneficioso para ambos. Sin embargo el comprador, un viejo matemático de fuerte carácter, se negaba a pagar más de 90. "¿Para qué, si tú no ibas a cobrar más?" Su amigo no pudo convencerle de que 100 era la cifra más justa, y qué iba a hacer, ¿dejar de vender un coche que necesitaba vender? ¿Dárselo al insoportable intermediario del lucrativo negocio de coches usados? ¿Iba a romper su vieja amistad con su colega por diez miserables dólares? Tras un último intento de regateo mientras le llevaba a su casa tuvo que apechugar aceptando un sobre con los 90. Llegaron y el viejo matemático arrancó su viejo nuevo coche, se despidió y se fue. El vendedor, entrando en casa, abrió el sobre y vio que tenía los 100 dólares que creía que nunca iba a recibir: Su amigo iba a darle 100 desde el principio.

Casi sin dormir, llegó a trompicones al trabajo al día siguiente pidiéndole a su amigo una explicación que terminara con sus cavilaciones. Habían tenido una fuerte discusión, podían no haber llegado a un acuerdo, podían no haber vuelto a hablarse; en pocas palabras, se había creado una situación de malestar a partir de la nada.

Con una sonrisa, su colega le pidió disculpas por haberle hecho partícipe de un experimento a pequeña escala, un experimento que formaba parte de la teoría de juegos que tenía como fin confirmar una vez más sus temores: La única regla que funciona en la teoría de juegos es que el más intolerante acaba saliendo con las de ganar.

Ya sea haciendo trampas, negándose a negociar, o defendiendo tajantemente una zona o una religión, si hay dos partes enfrentadas y una es razonable, va a tener que ceder. Si las dos son razonables, el caso ideal, es muy probable que una deje de serlo como estrategia. Si las dos partes son intolerantes, el diálogo se acaba. Hay terrorismo, opas hostiles, guerras santas. Qué gran razón tenían estos matemáticos, y qué mal lo plasmó Ron Howard en Una mente maravillosa.

Es increíble cómo una cosa que me es tan ajena como la política se introduzca en tanto en mi terreno, la ficción, a la hora de estipular algo tan inexistente, las fronteras. Todo raciocinio se pierde. El país que más proyecta su patriotismo hacia los demás es uno de los más jóvenes, más mixtos, con menos historia y ni siquiera tiene nombre de verdad. Y sin embargo han creado un amor por una bandera, un millón de tradiciones, un espíritu y un way of life. De entre las muchas cosas que deberíamos aprender de él, quizá la principal sea ese error conceptual que les ha llevado al liderazgo mudial, pero al revés, como ejemplo a no seguir, el budismo nacional, ir más allá del desprecio al McDonalds como rival y pensar que nosotros podríamos ser mejores que ellos no por ese arraigado sentimiento patriótico, sino por el hecho de preferir no tener patria, no buscar el glocalismo. Pero evidentemente, esto no podrá ser nunca así por lo unidos que van el poder y la tierra a la tradición, tanto, que si no existe hay que crearla. Léase Olentzero. Léase nacionalidad, realidad nacional. Ya que "racional" y "nacional" se parecen tanto, dentro de ese gran juego mundial deberían inventarse la palabra "Naciocinio", o mejor, "Naziocinio".

Claro, es lógico que los nacionalistas sólo se puedan entender de mentira con los interesados y de verdad con los tolerantes. Pero hacer uso del raciocinio ante un intolerante es una derrota de antemano. En las últimas elecciones generales no participé porque soñé con un chiste que Forges no ha llegado a hacer nunca:



Creo que la forma más asquerosa de dejar claro que todo es una gran mentira es repetir una y otra vez la mierda de frase que todos los políticos se han grabado con sangre: "Éste es un asunto serio, aquí hay unas reglas del juego."

No, señores. Las fronteras son un juego que sólo quieren jugar ustedes. Son una ficción y tenemos problemas reales, no queremos que ustedes jueguen. Hasta el celuloide es más tangible que sus fronteras, que todas, excepto una. La única frontera de verdad que tenemos aquí es la capa de ozono, y la estamos disolviendo en el sentido equivocado. Pero ésa es otra historia.

16 comentarios:

Anónimo dijo...

"El país que más proyecta su patriotismo hacia los demás es uno de los más jóvenes, más mixtos, con menos historia y ni siquiera tiene nombre de verdad."

Pero es que es justo por eso por lo que son tan patriotas, por su falta de historia. Si no la tienen, se crea. No sé si es algo que ha surgido de forma natural entre gentes que no tienen nada en común o si ha sido algo premeditado desde el poder, pero yo veo clara la relación entre la falta de historia y la mezcla de pueblos y gentes en EEUU y su ese enfervorizado patriotismo de banderas ondeando.

No existe nada más repugnante que los nacionalismos de cualquier tipo, todo lo que tocan queda manchado por el cinismo. Maravilloso concepto el de "Glocalismo". Me ha dejado prendado.

Anónimo dijo...

Un post complicado...
En un primer apartado habla de la teoria de juegos en el que el mas intolerante suele salir ganando. Pero no estoy del todo de acuerdo, y me explico. No estoy de acuerdo a largo término, está claro que a corto término el mas intolerante lleva las de ganar, pero en el caso que nos ocupa es el de dos amigos. Si no lo fueran, y el cambio se hubiera realizado a 90 por la obligatoriedad de venda del auto, en mi caso jamás volvería a negociar con el mismo personaje, en cambio buscaría en mi memoria a alguien con un punto de tolerancia o de pragmatismo en el negocio como el mio. Lo que llevaria a aislar a los intolerantes creándose grupos diferentes de negocio, con personas con mismas experiencias. Ah!! y si en el negocio que nos llevamos entre manos no conocemos con quién empezar? en que posición inicial nos colocamos la de tolerancia o la de intolerancia? Pues yo le contestaria que de la forma mas legal o "tolerante", nos podemos llevar un disgusto pero a la larga... en largo término estoy seguro que la balanza caería de nuestro lado.
Muy de actualidad el segundo apartado si aprovechamos la reciente notícia de la "terra nostrada"... pero la política utilizó, utiliza y utilizará los nacionalismos, banderas y fronteras para arrancar de lo mas bajo de nosotros (no me incluyo, que conste... las banderas las ondea el diablo como recientemente vi en la viñeta El Roto) votos para mantener posiciones, las cuáles se construyen sobre problemas ficticios o problemas que si se solucionaran no me harían mas feliz que un trabajo indefinido o una casa con valor de venta justo. Pero cómo escuché a Saramago decir (mas o menos)... la democracia actual no existe... siempre que la política tenga cómo base un pastel económico que en el fondo es el que hace y deshace según sus necesidades en una red intrincada ya con imposibilidades para ser desenredada. De todo lo demás que oigan a hablar a los mentirosos mejor vestidos del planeta... los políticos... es una auténtica patraña. Recomiendo del autor citado, Saramago el libro "Ensayo sobre la lucidez":

¿Qué pasaría si, como resultado de unas elecciones, en un país cualquiera, supuestamente democrático, más del setenta por ciento de las papeletas estuvieran en blanco?

thehardmenpath dijo...

Eso es relativamente probable que ocurra en el referendum nacional que tendrá lugar al final de esta legislatura, cuando se plantee el derecho de la infanta Leonor para heredar el trono. ¿Podrá ocurrir que un alto porcentaje de las papeletas sean en blanco?

En la teoría de juegos, está claro que las negociaciones prolongadas deben verse desde otros puntos de vista. La biología ha dado con numerosas soluciones para la cooperación, sí. Desde la simbiosis de algunos hasta... monos que se quitan los parásitos mutuamente, aves que dedican tiempo a avisar a la bandada para que alce el vuelo, la propia comunión de genes de nuestro cuerpo es un ejemplo de convivencia.

Y es ahí donde entra el raciocinio de un grupo de individuos, el que les permite formar una sociedad.

http://es.wikipedia.org/wiki/Dilema_del_prisionero

Cuando el dilema del prisionero se realiza una vez, siempre conviene desistir. Pero cuando se ejecutan comandos de cooperar o desistir prolongadamente, pese a que John Nash decía que siempre había que tirar por la intolerancia... ¿sabe quién es el que sale ganando?

Se hizo un concurso de programas de ordenador reproduciendo el dilema del prisionero hace tres décadas y el programa que salió vencedor con mucha diferencia se llamaba "Donde las dan, las toman".

xy dijo...

Qué susto, macho. Creía que realmente ibas a hablar de la peli

Anónimo dijo...

El primer problema es intentar explicar las relaciones sociales mediante la matemática. Como si se pudiesen aislar hasta tal punto los factores influyentes en cada caso.
Después, en reflexión a los nacionalismos, tenemos que matizar. Para especificar, por ejemplo en Catalunya o Euskadi existen muchos tipos de nacionalismos (algunos de ellos mal llamados nacionalismos). Pero tanto en Catalunya como en Euskadi como en el resto del terrirorio del estado existe un nacionalismo que es el peligroso de verdad, el nacionalismo vencedor: el españolismo. Tenemos muchos años de españolismo a la espalda y día a día estamos bombardeados por este nacionalismo. El españolismo es profundamente derechista. Está tan calado, que incluso las organizaciones y personas más izuierdistas, no conscientes de ello, hacen gala a menudo de un españolismo rancio.
En Catalunya y Euskadi también existe nacionalismo derechista. Pero cuidado. Hay mucha gente que más que nacionalista es internacionalista que está por la libre asociación de las comunidades. Eso muchas veces se identifica con el nacionalismo. A mi, personalmente, no me gusta identificarlo así.
Muchas veces uno no se da cuenta de su españolismo cuando quiere defender un supuesto internacionalismo. No os dejeis engañar por lo que diga Rajoy, en Catalunya tienes muchos mas problemas hablando catalán que hablando castellano. Muchissimos más.
Si estás por la libre asociación de colectivos y culturas no estás por las fronteras. El problema esque muchas veces no se da uno cuenta de la imposición que representa España.

Trevor Reznik dijo...

Muy bueno!

xy dijo...

La teoría de juegos no pretende ni de lejos explicar las "relaciones sociales" de los seres humanos. Lo hermoso de dicha teoría es que es capaz de hallar modelos matemáticos que reproduzcan el comportamiento de la gente en circunstancias muy concretas y limitadas.

Y sobre tu rollo del nacionalismo me he enterado más bien de poco, la verdad.

Anónimo dijo...

Bien por lo del rollo. No es fácil, jeje.
Básicamente se resume en que a veces nos equivocamos al identificar los intolerantes.
¡Salud por este blog que es muy bueno!

thehardmenpath dijo...

El nacionalismo autonómico es respecto al español algo así como el sudor, presenta una solución que no deja de provocar problemas.

El "nacionalismo" siempre es conservador, aunque puede cohabitar en la mente con sentimientos como "república", pero la parte nacionalista siempre conservadora. Otra cosa es qué parte de la Historia es la que pretende conservar, y el planteamiento desde este punto de vista hace que el nacionalismo haga aguas por todas partes.

xy dijo...

Uri, la intolerancia es apolítica, créame

Anónimo dijo...

"El españolismo es profundamente derechista. Está tan calado, que incluso las organizaciones y personas más izuierdistas, no conscientes de ello, hacen gala a menudo de un españolismo rancio."

Reformularía la frase así: "Todos los nacionalismos son profundamente derechistas. Está tan calado, que incluso las organizaciones y personas más izquierdistas, no conscientes de ellos hacen gala a menudo de un nacionalismo ranciio."

El nacionalismo catalán y vasco es tan rancio como el español. Cambian los actores, el guión permanece.

Don Xmar dijo...

Este post es como un japonés en las Zamburguesas del Humor Amarillo, pero haciendo el novamás en cada salto.

Dificilmente se encuentran por el mundo post analíticos tan amenos como los que escribes, felicidades.

Por cierto, la teoría de juegos en particular es uno de los apartados matemáticos más excitantes. Siempre me ha atraído mucho.
Al hilo, anda por ahí un pdf de David de Ugarte, "Microeconomía del amor", que se lo recomiendo a todo el mundo aunque os la sude la economía.

Y lo de Forges, buenísimo.

Anónimo dijo...

Estoy totalmente de acuerdo (aunque no esté argumentado ni en vuestros comentarios ni en los mios... es la grandeza de la dialéctica). Por eso hay cierto tipo ideologia a la que llaman "nacionalismo" que yo prefiero no nombrarla así. Y, en el caso de Catalunya, no és el nacionalismo de ERC ni mucho menos el de CIU (eso es nacionalismo rancio del bueno).
Es lo que decía al final del post.
Se debería hablar de la libre asociación de las personas en comunidades.
Tal vez la palabra sea federalismo (y no el que dice que tiene maragall, que es una pamplinada).

Abajo las fronteras.

¡Viva el rey!

Anónimo dijo...

Si te crees que el nacionalismo de ERC no es rancio... Lo que pasa que a los de esquerra se les ve mas personillas que a los otros momias pero las ideas son igual de rancias.

Diego Rodriguez-Vila dijo...

El problema del nacionalismo no es que sea nacionalista, es que es intolerante.
A mi no me importa que un catalán o un vasco no se sientan españoles. Me resulta incomprensible porque para mi ser español es bueno, pero entiendo que no tiene porqué parecérselo a ellos.
El problema viene cuando no expresan sus opiniones con los medios adecuados y empiezan a asaltar sedes y reventar mítines, cuando no a secuestrar, extorsionar o matar directamente. No es un problema de fronteras, sino de libertad.

DiAnA LóPeZ" dijo...

MAGNIFICO, Es increible que en todo el mundo este pasando esto, y no puedo dudar ni un sólo momento de mi país México en dodne los diputados y todos aquellos mediocres que se encuentran en las tribunas fumando y no prestando antención les valga un reverendo comino y se pasen los tratados de comercios por loes pies, no es justo!, que un encargado dé declaraciones como : "es que ... no leímos bien y lo aprobamos , pero vamos haber si hacemos algo", lamentablemente, nuestrp mundo está conducido por gente que sólo busca intereses económicos y no la vida humana o el progreso de un país como tú dices la "el glocalismo"... Pero aún tenemos la oportunidad de hacer cambios,¿ de que forma?....¿boicot?,...

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